La música, un gran vehículo para el aprendizaje

/ abril 20, 2018/ Proyecto educativo

La música juega un papel importante en todas las jornadas de Trastes, pues nos acompaña durante distintos momentos del día para diferenciar actividades e interiorizar rutinas. Pero nuestro horario en la escuela infantil incluye también clases de música, en la que los sonidos son los protagonistas. En la imagen observamos un momento de la clase de música del aula de 2 a 3 años de Trastes Los Rosales (A Coruña).

Las clases de música implican conocer de forma progresiva los instrumentos, sus distintos tipos e iniciarse en la manipulación de algunos de ellos. Los de percusión son los que a estas edades adquieren un mayor atractivo por su facilidad de manipulación y su sonoridad, por eso en nuestras escuelas no faltan panderos, panderetas, sonajas, crótalos, xilófonos, triángulos… Los niños desde muy pequeñitos disfrutan haciéndolos sonar y descubriendo a través de ellos los distintos tipos de timbre.

Con música nos familiarizamos en el primer ciclo de la Educación Infantil con el ritmo, aprendemos a diferenciar los sonidos largos y cortos, así como los agudos y graves. Pero la música está íntimamente ligada a muchísimas otras cosas: al baile (psicomotricidad y coordinación); al desarrollo del oído (estimulación auditiva); a las canciones (desarrollo del lenguaje)… Con las actividades musicales aprendemos nuevas palabras, nuevos sonidos y sensaciones, las vinculamos con estados de ánimo y también trabajamos así la educación emocional. Ponemos además canciones en inglés y nos familiarizamos con vocabulario en este idioma.

En muchas ocasiones aprovechamos las manualidades para hacer pequeños instrumentos musicales (como castañuelas con chapas de botellas, por ejemplo) y otras veces hay actividades que convertimos en momentos de música o de sonoridad, como puede ser el caso de juegos para moverse o pararse según haya ruido o silencio. Por si esto fuera poco, la música también nos ayuda en los momentos para la relajación y para la conciliación del sueño.

Así que… ¡En Trastes adoramos la música!