¿Cómo reforzar en casa el aprendizaje del inglés?
Para el aprendizaje de un idioma extranjero, aunque los niños y niñas reciban formación en el centro escolar, resulta valiosísimo todo el apoyo que podamos brindar desde casa. De hecho, el contacto natural y frecuente con el idioma es el que hará posible su interiorización, tanto desde el punto de vista del significado de las palabras como por lo que respecta a la fonética. Mientras que para un adulto aprender a pronunciar correctamente resulta bastante complicado, un niño de corta edad adquiere con fidelidad la pronunciación que escucha.
Si nos lo proponemos, aunque no sepamos inglés o nuestro dominio sea muy rudimentario, en nuestra rutina diaria podemos adoptar hábitos que permitan que los más pequeños estén en contacto con este idioma. De esta manera, complementaremos de forma muy enriquecedora el trabajo que se realiza en las aulas de Trastes Centros de Educación Infantil. ¿Qué es lo que resulta indispensable para poder poner estas medidas en práctica? Simplemente tener la voluntad de adoptarlas y de mantenerlas en el tiempo. A ver qué te parecen algunas ideas.
Poner la televisión en versión original
Es innegable que la exposición a contenidos audiovisuales en un determinado idioma contribuye a su aprendizaje. Podemos pensar que los niños y niñas pequeños no van a entender nada si observan los dibujos animados en inglés. Sin embargo, su experiencia será la misma que con el castellano, pues cuando ven a sus personajes favoritos hay una enorme cantidad de vocabulario que aún no han aprendido tampoco de su idioma natal. Progresivamente irán entendiendo cada vez más frases, vocabulario y expresiones. Además, cuando pasen los años comprobaréis que sus habilidades de listening en inglés estarán a años luz de las vuestras.
Para adoptar de forma estable esta medida, es mejor configurar el televisor para que emita en versión original, en lugar de cambiar el idioma cuando emitan el programa dirigido al menor. Pensemos que la escucha de la televisión en inglés ha de ser su cotidianeidad y no la excepción. Tener que cambiar el idioma en cada ocasión conducirá inevitablemente a dejar de hacerlo en algún momento, por prisas, pereza, etc.
Canciones
Los niños y niñas disfrutan con la música y con las canciones. No sólo para bailar, sino también para jugar. Su ritmo o la contraposición música-silencio nos ofrece pautas para jugar con el movimiento corporal: correr y parar, saltar, golpear con los pies en el suelo, dar palmas… Hay infinitas posibilidades. Si además la canción tiene letra, los gestos o las onomatopeyas suman un nuevo componente a este tipo de juegos musicales.
Las sencillas canciones en inglés, igual que las de cualquier idioma, permiten a los más pequeños repetir fonemas, repetir palabras y frases, aprender vocabulario… Pero sobre todo pasar un rato divertido. Hay muchísimos recursos online donde podemos encontrar canciones en inglés para niños y niñas pequeños, sobre múltiples temas: números, letras, las estaciones, animales, saludos, etc.
Leer cuentos
El cuento es la herramienta de aprendizaje por excelencia para todos los niños y niñas. Todos disfrutan con las sesiones de cuentacuentos y con la lectura de cuentos en familia, no solo por lo que cuenta el cuento en sí, sino por la atención que a través de ellos reciben de quien se los lee. Se trata de un tiempo especial que puede ser aprovechado también para la lectura en inglés. Como con las canciones, hay miles de títulos de álbumes ilustrados pensados para la iniciación a la lectura. Si no tenéis en casa, seguro que en la biblioteca de vuestra localidad encontráis muchos ejemplos.
Si no tenéis conocimientos de inglés o dudáis de vuestra habilidad de pronunciación, siempre es útil buscar libros conocidos, pues suele haber en internet vídeos en los que son leídos, y nos permiten tener una referencia apropiada.
Frases del día a día
No lo pensamos, pero hay frases que repetimos todos los días. Saludos, indicaciones del tipo “vamos a lavarnos las manos”, “es hora de irse a la cama”, “no tires eso al suelo” o “recoge los juguetes”. ¿Nos proponemos decir siempre esas frases en inglés? Es una forma sencilla de incorporar más inglés en el entorno del menor, pues observará un uso regular de este idioma en su contexto familiar.
Actividades en familia en inglés
En relación con el punto anterior, podemos vincular el inglés a determinadas actividades que disfrutemos en familia. Por ejemplo podemos proponernos cocinar alguna receta sencilla con su ayuda. Para ello, nos guiaremos con un tutorial de cocina para niños en inglés. ¡Seguro que nosotros también aprendemos mucho siguiendo la receta! Otra opción sencilla y muy interesante es por ejemplo seguir sesiones de yoga para niños en inglés. Esta actividad es pausada y nos ofrece indicaciones muy intuitivas con las que aprendemos vocabulario corporal y espacial.
Etiquetar objetos de la casa
Poner etiquetas a los objetos con su nombre es una actividad muy interesante para la iniciación a la lectura en cualquier idioma, y por supuesto también en inglés. Podemos hacerlo de forma muy sencilla, con ayuda de papel y cinta adhesiva. Con el paso del tiempo, el niño o niña asociará la grafía a su objeto y a su pronunciación.
¿Qué te han parecido estas ideas? ¿Te animas a ponerlas en práctica?