Observamos cómo se crean los colores con acuarelas
La técnica de pintura con acuarela es muy placentera para los pequeños y permite enseñarles fácilmente qué pasa cuando mezclamos colores. De eso se ha tratado la clase a la que corresponde esta fotografía, tomada en Trastes A Grela (A Coruña), en el aula de tarde de 2 a 3 años.
Pintar, hacer trazos y colorear es una actividad que motiva mucho a los niños y niñas, porque despierta su imaginación y creatividad y reafirma su autoestima. Ellos son los que crean motivos sobre un papel o superficie en blanco. Observar sus propias creaciones y mostrarlas a los adultos es para ellos una gran satisfacción. La pintura es una tarea que además contribuye a relajarles y favorece la concentración, sobre todo si al tiempo se acompaña de música tranquila.
Pero esta actividad sirve también para canalizar otros aprendizajes, no sólo por lo que se refiere a habilidades físicas (psicomotricidad fina y coordinación ojo-mano), sino además para hablar de los motivos que se están pintando, y de paso utilizar el inglés. En esta ocasión la educadora hizo que los alumnos se fijasen en las mezclas de colores. Así, observaron qué sucede cuando mezclamos los colores primarios (o añadimos blanco o negro) y surge el naranja, el verde, el rosa… Red with blue turn into… purple!